Hace algunas semanas se hizo pública que se iba a implementar en España un nuevo añadido al etiquetado alimentario: Nutriscore. Ya implantado en países como Francia o Alemania, es una escala cuyo objetivo es mostrar de una forma intuitiva qué alimentos procesados son más recomendables. ¿El problema? Que nuestro amado jamón ibérico, no solo no aprueba, sino que ha sacado la peor nota. Bajo este algoritmo, este alimento se considera de “consumo desaconsejado”. Esto es aún peor cuando hay estudios que demuestran que no solo no es dañino, sino que el jamón ibérico es un alimento muy saludable.
Debemos empezar definiendo el Nutriscore y explicando los criterios de puntuación que utiliza para asignar notas. Después, os animamos a que continuéis leyendo para descubrir todas las características nutritivas que hacen que el consumo del jamón ibérico sea saludable.
¿Qué es Nutriscore?
Nutriscore es una iniciativa europea que pretende indicar a los usuarios de una forma intuitiva qué alimentos son saludables y cuáles no lo son tanto. Para ello, usa un algoritmo en el que, por cada 100g de producto, algunos nutrientes, como los azúcares, suman puntos y otros, como la fibra, lo restan. Cuantos menos puntos saque un alimento procesado, mejor valoración tendrá. Esto, se plasma en una etiqueta en el envase que va desde la E, marcada con rojo o “nada saludable”, hasta la letra A, de verde oscuro, que se entiende como “muy saludable”.
La idea es que los consumidores podamos ver qué alimentos procesados deben formar parte de nuestro consumo habitual y cuáles deben ser evitados.
Aunque de primeras parece sencillo y eficiente, Nutriscore está generando cierta polémica a la hora de valorar alimentos: ¿cómo es posible que una caja de cereales de chocolate, con harinas refinadas y mucho azúcar saque la mejor nota mientras que productos de la dieta mediterránea como el jamón ibérico o el aceite de oliva saquen la peor?
¿En qué se basa Nutriscore?
En primer lugar, este algoritmo es hackeable. Esto significa que un alimento que ha sacado mala nota puede corregir esa puntuación añadiendo otros aditivos que el algoritmo considera positivos. Esto suma como complicación, ya que el procesado del jamón ibérico sigue una técnica tradicional y artesanal que no admite aditivos para corregir esta calificación. Hay algunos productos a los que ni se les puede, ni se les debe añadir aditivos para mejorar esta puntuación. El jamón ibérico es, sin lugar a dudas, uno de ellos.
Por otro lado, este algoritmo no valora la calidad de estos macronutrientes, ni las propiedades saludables que se ha demostrado que tienen. Quedan fuera de la ecuación otros elementos muy beneficiosos para la salud. El ácido oleico, esencial para regular el colesterol, y abundante en el ibérico, es uno de ellos.
El jamón ibérico es saludable
Aunque lo marca de color rojo oscuro, este etiquetado no valora todos los estudios que se han realizado, y que demuestran que, no solo no es un alimento desaconsejado, sino que el jamón ibérico de bellota tiene demostrados beneficios para la salud cardiovascular.
El cerdo del que sale el jamón ibérico de bellota o de campo (brida negra o roja) se cría en la dehesa, en libertad. En ese ambiente, su alimentación es natural. Pasto, hojas y frutos del entorno, es decir, alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas y minerales.
Gracias a este entorno natural y saludable, la carne de cerdo ibérico resulta contener un alto porcentaje proteínico de gran calidad (tanto es así que en 100g de jamón ibérico, hay una tercera parte de la porción de proteínas diarias recomendadas). Además de esto, el jamón ibérico tiene minerales, y vitaminas en abundancia.
En el caso de los cerdos ibéricos que son alimentados con bellota, los beneficios se disparan, ya que este fruto es rico en ácido oleico. Este ácido graso es el mismo que hace que el aceite de oliva sea tan beneficioso para la salud. Esto se debe a que es el que regula la cantidad de colesterol LDL (el malo) en la sangre. El ácido oleico, que es tan beneficioso para la salud cardiovascular, abunda en la carne del jamón ibérico de bellota.
El jamón ibérico y Nutriscore
Como con casi todos los alimentos, es cierto que no es bueno abusar de su consumo, pero su calificación como “desaconsejable” por Nutriscore tampoco parece ajustarse demasiado a la realidad nutritiva del jamón. Hay elementos esenciales de la nutrición que se han omitido por completo de esta escala, y se nota en los conflictos que está provocando. El jamón ibérico es saludable, y forma parte de la estupenda dieta mediterránea, que por su variedad y riqueza nutritiva, es considerada una de las más saludables del mundo.
